Y el ritmo de moda es... "El tío Alan y toda su batería...!"
En el Perú pasamos del tío Vladi al tío Alan como si nada... y ambos, vinculados al narcotráfico y la corrupción.
Pienso:
¿Qué clase de gente es la que ha gobernado nuestro amado país en estos últimos tiempos?, la verdad, es para llorar...
¿Cómo pueden existir todavía personas que aun piensen votar y confiar en estos personajes o en los partidos con los que se vinculan?
¿Acaso no les indigna el robo, la corrupción, los sinvergüenzas y el crimen?
Qué triste.